sábado, 17 de diciembre de 2011

Al agua patos!




La cara. Presta especial atención a la parte posterior de las orejas y a los pliegues del cuello. Mientras le sujetas la cabecita, lávale cada ojo con suavidad utilizando una gasa empapada en agua o suero fisiológico.

El pelo. Puedes mojarle el pelo y aplicarle una pequeña cantidad de champú especialmente formulada para niños, que no irrite los ojos. Masajéale suavemente la cabeza mientras eliminas los restos de champú, aclarando con agua.

El cuerpo. Para lavar el cuerpo del bebé debes utilizar un jabón líquido suave especial para niños. Puedes empezar a lavar su cuerpo por el cuello, siguiendo con los brazos, las manitas, la cintura y terminando por las piernas y los pies. Aclara y seca con paciencia los pliegues de la piel para evitar que el exceso de humedad le provoque irritaciones cutáneas.

La zona del pañal. Se trata de una zona especialmente sensible. Por esa razón, hay que cambiar los pañales con frecuencia y lavar el área del pañal usando agua templada y jabón líquido suave. Es importante el uso de una crema apropiada para esa zona.

El cordón umbilical. Hay varias formas de tratar la zona del cordón umbilical. Una de las más recomendadas consiste en limpiar el cordón con una gasa estéril empapada en una solución antiséptica o con agua y jabón.