martes, 7 de febrero de 2012

Dolor de parto.


El dolor del parto se debe, sobre todo, a las contracciones de los músculos uterinos y, en cierta medida, a la presión que ejerce el bebé sobre el cuello del útero. Este dolor se manifiesta en forma de retortijones y espasmos de la zona abdominal, inguinal y dorsal, acompañados de cansancio y dolores generalizados. Algunas mujeres también experimentan dolor en los costados y en los muslos.
Otra causa de los dolores durante el parto es la presión que ejerce la cabeza del bebé sobre la vejiga y los intestinos, así como la dilatación del canal del parto y la vagina.
A pesar de que suele considerarse que el parto es uno de los episodios más dolorosos de la experiencia humana, el dolor varía mucho de una mujer a otra y de un embarazo a otro. Las mujeres experimentan los dolores del parto de forma diferente —en algunas son parecidos a los espasmos menstruales; otras experimentan una fuerte presión; y otras, oleadas de un dolor muy intenso que se asemejan a los retortijones que acompañan a los episodios de diarrea.
Para reducir el dolor durante el parto, puedes empezar a practicar lo siguiente antes de quedar embarazada o durante el embarazo:
  • Hacer ejercicio físico de manera regular y razonable (a menos que su médico te lo desaconseje) puede ayudarte a fortalecer la musculatura y a preparar tu cuerpo para el esfuerzo del parto. El ejercicio también incrementa la resistencia, que será de gran ayuda en los partos largos. Lo más importante que debe tenerse en cuenta a la hora de practicar cualquier ejercicio es no exagerar; esto es muy importante durante el embarazo.
  • La técnica Lamaze: Postula que el parto es un proceso normal, natural y saludable, y que se debe preparar a las mujeres para afrontarlo con confianza. En las clases de Lamaze se instruye a las mujeres sobre las formas de disminuir la percepción del dolor; por ejemplo, a través de técnicas de relajación, la respiración profunda, la distracción o los masajes del acompañante. Este enfoque adopta una postura neutral en lo que se refiere a la medicación para controlar el dolor, incitando a las mujeres a tomar una decisión bien fundada sobre qué es mejor para ellas.
  • El método Bradley (también conocido como “parto asistido por el padre”) enfatiza el enfoque natural del parto y la participación activa del padre del bebé como ayudante. Uno de los principales objetivos de este método consiste en evitar la medicación a menos que sea absolutamente necesaria. El método Bradley también hace hincapié en la alimentación sana y equilibrada, la práctica del ejercicio físico durante el embarazo y las técnicas de relajación y respiración profunda como formas de afrontar el parto. A pesar de que el método Bradley defiende una experiencia de parto exenta de medicación, en las clases también se prepara a los padres para posibles complicaciones o situaciones inesperadas, como una cesárea de urgencia.
  • Otras formas de controlar los dolores del parto incluyen las siguientes:
    • hipnosis
    • yoga
    • meditación
    • caminar
    • masaje o contrapresión
    • cambio de postura
    • darse un baño o una ducha
    • distraerse contando o realizando una actividad que mantenga la mente ocupada en otra cosa.
  • Fármacos:
    • Los fármacos alivian parte del dolor, pero no lo evian por completo.
    • El parto suele ser más doloroso que lo previsto. Algunas mujeres que en un principio dijeron que no querían recibir ningún tipo de medicación para el dolor terminan cambiando de opinión en medio del parto. 
    • Los medicamentos para el dolor  afectan el parto: su tensión arterial puede bajar, el parto puede alargarse o acortarse, puede sufrir náuseas y puede experimentar una sensación de falta de control  
    • Los medicamentos para el dolor pueden afectar al bebé: éste puede nacer adormilado o presentar alteraciones en el ritmo cardíaco.  
    • Si es necesario practicarle una cesárea, le darán anestesia local o general. La anestesia general se da en urgencias cuando la madre y/o el bebé presentan alguna afección que podría poner en peligro sus vidas.